Ayer hablé de mi pasado. Un pasado que a veces uno quisiera dejar por un lado. Enterrarlo, como si realmente no hubiera pasado. Un pasado que a veces lastima, y a veces te hace dichoso. Un pasado que a veces te averguenza y a veces te hace sentir orgulloso.
En mi vida he hecho cosas de las cuales no estoy muy orgullosa. De hecho, no estoy para NADA orgullosa de ellas. Pero, sea como sea, estos eventos me han forjado. Me han hecho ser quien soy. Y creo que eso no lo cambiaría nunca...
De cualquier forma, ayer me desahogué. En El Sendero lo hice también, de una forma Extraordinaria, pero esta vez lo hice con una persona que me conocía, lo cual lo hizo infinitamente más difícil... Creo que realmente saqué sentimientos que estuvieron guardados dentro de mi durante más tiempo del necesario, y eran terribles sentimientos que me lastimaban...
Cómo puede ser que un recuerdo que en su momento fué hermoso, ahora te mata de dolor????
Pero ahora estoy más tranquila. Siento que (aún más de lo que logré hacerlo en El Sendero) terminé de liberar a mi alma de aquellas ataduras que tanto mal le causaron, y ahora podrá respirar tranquila, sin más alambre de púas reteniéndola en el campo minado del sufrimiento...
Por favor, Dios no permita que mi corazón regrese a su estado de depresión, de amargura y desolación...
Por favor, permíteme de una vez y para siempre... SER FELÍZ......
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