Dijo que, como a 20 metros de él, venía una figura femenina, vestida de blanco con telas vaporosas, pasadas de época. tenía el cabello largo y suelto hasta las caderas, semioculto por un velo blanco aún más largo. Dijo que parecía como si flotara sobre el suelo, no daba la impresión de caminar. Pero lo que más lo asustó, lo que lo hizo casi salir corriendo, fue que esta cosa volvió a chillar de nuevo, y al hacerlo, vio su cara, y ésta era solo jirones, nada que tuviera sentido, era solo una mancha borrosa y deforme, en la que se abría un agujero de donde podía escuchar el grito, más fuerte que nunca, y que dejó de ser un grito para tomar la forma de un lamento.
Aaaaaaaayyyyyyyyyyyy
Mi tío contaba que no volvió la cabeza nuevamente, ni aflojó el paso sino hasta que se encontró al menos 15 cuadras lejos de ahi,por miedo a ver eso de nuevo. Decía que el miedo que pasó fue tan grande, que hasta diarrea tuvo por dos días seguidos, reportándose enfermo en su trabajo y rehusándose a hablar del tema. Duró años sin mencionarlo, y más años aún en pasar de nuevo por esa calle, y jamás lo hizo de nuevo en la noche.
Mi tío murió hace ya muchos años, pero no dudo que ese momento lo haya recordado hasta sus últimos días.
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